Biogás: una alternativa energética real

Last modified by the author on 18/03/2020 - 15:55
Biogás: una alternativa energética real

Origen del biogás y repercusiones

Originariamente el biogás ha existido desde que hay seres vivos y al morir sus cuerpos, ya sean vegetales o animales, se descomponen. Prueba de ello es el gas natural u otros gases que generaron en el subsuelo al mismo tiempo que el petróleo. Pero estos gases no se consideran biogás puesto que se formaron de forma diferente y no entran en el ciclo de vida actual.

Pero si nos referimos a la generación “industrial” o con intervención humana del biogás, esto se ha llevado a cabo hace pocas décadas. Es en China, en la década de los 70 cuando se impulsa la construcción de digestores, mediante programas de ámbito nacional (Campos, 2001). En 1977 ya había más de 5 millones de digestores anaerobios en China, debido a la mayor economía de los materiales empleados, lo que reducía los costes de inversión.

En cambio, en los países industrializados el desarrollo de sistemas de generación de biogás y su aprovechamiento ha estado más influenciado por criterios medioambientales que los puramente energéticos. Siendo en método clásico de estabilización de las aguas residuales urbanas. De hecho, hasta que se produjo la “Crisis del Petróleo”, el proceso anaerobio había sido considerado por los países industrializados como un tratamiento para reducir las altas cargas orgánicas de algunos residuos, pero sin aprovechar los lodos como fertilizantes y el metano como combustible.

Fuente de la imagen: ©Hogarsense.es – Planta de compostaje con digestión anaerobia.

Biogás como suministro energético

¿Sabías que el biogás es el combustible alternativo que más potencial tienen en Europa? Es que esta energía se obtiene a partir de materia orgánica, que se biodegrada mediante la aportación de microorganismos en ausencia de oxígeno. A nivel europeo, Suecia y Alemania se sitúan a la cabeza en producción de biogás. En el país nórdico, su uso como combustible ha superado al del gas natural. Así lo afirma la European Biogas Association, que estima que en 2020 el volumen de producción se incrementará en los países europeos. En lo que respecta a España, todavía no despega esta energía alternativa, sobre todo, debido, en gran parte, a la falta de una legislación potente que la ampare.

¿Qué beneficios tiene?

1. Renovable

Podemos considerar al biogás como una energía renovable ya que se aprovechan los residuos que se generan en el día a día de cualquier actividad, tanto en nuestra vida doméstica, como en las granjas de animales, como en la agricultura. Un ejemplo de estos residuos son por ejemplo los restos de la recogida del arroz, que en gran parte de la zona de la Albufera de Valencia y del delta del Ebro, actualmente se queman, sin aprovechar su potencial como generadores de biogás y biocompostaje. Así mismo, todas las plantas de tratamiento de residuos solidos urbanos (la basura que generamos en nuestras casas) son potenciales “fabricas de biogás” que aún no estamos aprovechando al 100%.

2. Amigable con el medio ambiente

Dado que el CH4 es una gas que tiene un impacto para el calentamiento global 21 veces superior al CO2 (efecto invernadero), el aprovechamiento apropiado del biogás tiene un gran potencial para contribuir a reducir emisiones de gases de efecto invernadero. Es decir, si lo aprovechamos, en vez de dejar que la materia orgánica se pudra a la intemperie ayudamos al medio ambiente. Entre las ventajas de su aprovechamiento contamos con:

- No emite dióxido de azufre, que además es el principal causante de la lluvia ácida.

- Disminuye la concentración de partículas en suspensión de monóxido de carbono y de hidrocarburos, respecto a otros carburantes.

- Permite reducir la dependencia energética de los combustibles fósiles.

3. Permite garantizar el suministro eléctrico descentralizado

Ya que hay posibilidad de utilizar el biogás generado en cogeneradores que den calefacción o agua caliente para los habitantes de la población y electricidad para su uso. Evitando así las perdidas que se producen en el transporte eléctrico a grandes distancias. Un ejemplo de ello lo encontramos en el pueblo valenciano de Aras de los Olmos, que pretenden desconectarse de la red eléctrica, generando ellos mismo su electricidad a través de 4 fuentes, la biomasa, la hidráulica, la solar fotovoltaica y la eólica.

4. Fomenta el empleo 

Estas instalaciones necesitarán de personas que las gestionen, cuiden de su correcto funcionamiento y las mantengan, además de alimentarlas con los residuos de otras actividades cercanas.

Biogás para calefacción

Como ya hemos comentado anteriormente, el biogás es una energía renovable que puede usarse para cualquiera de las grandes aplicaciones energéticas: eléctrica, térmica o como carburante. Puede canalizarse para su uso directo en una caldera adaptada para su combustión, e incluso inyectarse (previa purificación hasta biometano) en las infraestructuras de gas natural existentes, tanto de transporte como de distribución. Actualmente el aprovechamiento que se está realizando del biogás, se centra a nivel semi-industrial en las propias plantas de tratamiento de cereales, productoras de bebidas a base de cereales, de caña de azúcar o en explotaciones ganaderas.

Pero si nos centramos en la energía biogás como fuente de calefacción, su uso aún no esta muy extendido, y la razón principal es que una vez obtenido el biogás se puede utilizar como cualquier otro combustible para la generación de calefacción. Bien usándolo directamente como combustible en nuestro hogar, como generando electricidad y aprovechando dicha electricidad para la calefacción. Las diferentes formas de utilizar el biogás para nuestra calefacción pueden ser las siguientes:

Una vez obtenido el biogás se puede utilizar como cualquier otro combustible para la generación de calefacción. Incluso puede servir la misma caldera de gas, con algunas modificaciones en su quemador. La forma de utilizar el biogás para nuestra calefacción son varias:

Generar electricidad en cogenerador: la electricidad obtenida la emplearemos en nuestro aire acondicionado o bien en un suelo radiante eléctrico, en radiadores eléctricos de calor azul, en calefactores por infrarrojos o en calentadores eléctricos de agua que llevaremos a nuestros radiadores o suelo radiante.

Quemar el biogás directamente en una caldera de gas: adaptada para este tipo de gas, con la que calentaremos agua que llevaremos a un suelo radiante o a los radiadores de nuestra vivienda.

Utilizar el biogás directamente en climatizadores por aire alimentador por gas: Este sistema no es muy conocido en España, pero no por ello debemos olvidarnos que existe es otra alternativa para la utilización del biogás.

El biogás en España

Pese a los esfuerzos realizados, la importancia de España como productora de biogás industrial es bastante discreta, situándose en el puesto 22 de los 28 países que conforman la Unión Europea. En los últimos tres años el número de plantas de biogás en España ha ascendido de 5 a 22. Y según se extrae del informe de 2015 de L'Agence de l'Environnement et de la Maîtrise de l'Energie (ADEME), se observa la posición bastante retrasada de España en cuanto a producción de Biogás por habitante.

Fuente de la imagen: ©Hogarsense.es con datos de EurObserv’ER

Fuente de la imagen: ©Hogarsense.es con datos de EurObserv’ER

 

Un ejemplo del aprovechamiento de residuos solidos urbanos para generación de biogás, es el antiguo Vertedero Municipal de Bens en A Coruña, en el cual se genera Biogás. Esta planta se encuentra actualmente en su fase final de producción por agotamiento del biogás del antiguo vertedero, por lo que actualmente solo funciona un grupo de producción de energía. Con una potencia instalada de 2.500 kW.

Otro ejemplo es la estación depuradora de aguas residuales de la fabrica de Heineken en Quart de Poblet, Valencia, en la que se estudió la posibilidad de utilización del biogás generado en una turbina que pudiera generar la electricidad suficiente para abastecer toda la Estación depuradora, pero fue descartado por la empresa por la necesidad de realizar un proceso de lavado previo del biogás, y la inversión de este equipo junto con la de la microturbina elevaba el periodo de retorno demasiado para las exigencias de la empresa. Así es que se decidió por la inyección del gas en la red de gas natural, para poder valorizarlo.

 

 

Compartir :
Autor de la página

Desiree Izquierdo

Country Manager Spain